Quien tenga entre sus conocidos a algún community manager posiblemente haya escuchado en más de alguna ocasión sus quejas sobre lo difícil que es llevar ciertas cuentas y lo difícil que es determinar qué contenidos debe publicar en ellas. A eso se suma que acumular nuevos fans y hacer que se generen grandes cifras de engagement es mucho más complicado que lo que es en otras cuentas que gestionan.
¿Qué tienen en común todas estas cuentas difíciles? El punto común de todas ellas suele ser el tipo de marcas que son y el tipo de mercado al que deben llegar. Casi todas ellas son cuentas B2B, complicadas compañías en las que uno no sabe muy bien qué hacer en Facebook o Twitter.
Lo cierto es que esos community managers que no tienen muy claro qué hacer con sus marcas no están solos, como uno puede descubrir rápidamente cuando habla con más de uno de ellos o cuando analiza los resultados de los estudios. Qué hacer con los perfiles sociales cuando uno se mueve en el universo B2B no es fácil.
Según acaba de demostrar un estudio, las marcas B2B emplean las redes sociales, pero no están consiguiendo realmente conseguir triunfar en ellas. Según datos de Webbiquity, el 88% de las empresas B2B usa Facebook, lo que es simplemente un 8% menos que las compañías B2C. A pesar de este ratio, las firmas B2B no logran entrar ni en las listas de casos de éxito ni en los top ten de las marcas más populares en redes sociales. Como apuntan en SocialTimes no es por falta de intentarlo, sino más bien por una falta de una adecuada estrategia.
Parte de la clave del problema está en el propio momento en el que las compañías entraron en el universo de las redes sociales, que fue más tarde que las marcas B2C. Esto hizo que fuesen a rebufo, por así decirlo, y que tuviesen todo ya inventado. Las firmas business simplemente copiaron y siguieron la pauta de lo que habían establecido las compañías, convirtiendo lo que ellas dicen y hacen en una suerte de ley. Y ahí está, como señalan en el análisis de SocialTimes, el problema.
No hay que convertirse en esclavo de la lista de tareas
Uno de los primeros efectos que tuvo el seguir a las marcas de consumo en la aproximación a las redes sociales ha sido el de haber creado una suerte de lista de tareas. Las marcas tienen que hacer una serie de cosas y tienen que hacerlas siempre, pero lo cierto es que eso no siempre es lo que mejor se adecua a su perfil y a las necesidades de su mercado.
A las marcas B2B, alerta, quizás no les interese tanto el publicar cada día, hacer millones de amigos y responder a los comentarios, sino más bien el hacer aproximaciones muy segmentadas y con objetivos claros. Más que hacer lo mismo que las otras tienen que probar lo que a ellas les funciona: Intel tiene 25 millones de seguidores en Facebook pero lo ha logrado no con lo de siempre sino haciendo una gran apuesta por el contenido generado por usuarios.
Y no hay que repicar la estrategia de los demás
Pero, sobre todo, las marcas no tienen que simplemente usar la estrategia de los demás, sino que tienen que crear su propia estrategia. Tienen que ser capaces de encontrar lo que les funciona a ellos y las redes sociales en las que realmente encajan. No hay que estar en todas partes, alertan, sino estar en aquel lugar en el necesitan estar. Y, sobre todo, el contenido tiene que ser propio, tiene que ofrecer una experiencia diferenciada y distinta, que haga a la compañía algo único.
Source: Puro Marketing