TESLA: Construyendo un mito

Federico Weidemann Sin categorizar

 

Uno de los procesos más bonitos en el mundo del marketing es el de la creación de marcas que quieren convertirse en míticas.

Marcas míticas son, por ejemplo, Louis Vuitton en bolsos o Rolls Royce en automóviles. Estos ejemplos son de artículos de lujo, pero podemos encontrar marcas míticas en muchas otras categorías. En todo caso, los valores trascendentes que ofrece la marca mítica la benefician en el competido mercado de los consumidores con aspiraciones. También agregan puntos al ‘capital’ de la marca, dando una reserva adicional de tiempo (pero no ilimitado) a las empresas demasiado perezosas en el entorno rápidamente cambiante en el que nos encontramos.

Hay varios trucos conocidos para desarrollar marcas míticas, entre ellos:

  • Creación de un producto icónico que se mantiene en el portafolio durante mucho tiempo, con actualizaciones si es necesario (la maleta XX creada para exploradores…).
  • Asociación con líderes de opinión vinculados a la marca (Marilyn usaba tal perfume…, el Rey consume estas verduras…).
  • Desarrollo de una historia coherente y prestigiosa en torno a la marca (… lo usaban exclusivamente los matriculados en Harvard y luego lo abrieron al mundo…).
  • Tocar nuestra fibra sensible transformando una inversión o gasto en un legado para nuestra propia estirpe (el fabuloso: Nunca este reloj de 15.000 euros es del todo suyo, suyo es el placer de custodiarlo…).

TESLA ha decidido ponernos la piel de gallina con algo parecido al último de los trucos, en colaboración con el fabricante de juguetes Radio Flyer. La imagen del vehículo del padre e hijo/a juntos con la funda en el garaje es conmovedora. Chapeau para TESLA y Radio Flyer!!

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Hoy por hoy no se puede considerar al EV como una tecnología madura. Existen claras limitaciones en el ámbito de la autonomía, coste, y de la red de recarga. Por ese motivo los grupos líderes del sector como GE, Toyota, VW, etc, han elegido una estrategia seguidora, que no líder, ya que una canibalización efectiva del motor de explosión por el eléctrico es ahora imposible.

Pero eso va a cambiar en los próximos años, quizás no tan rápido como vimos en el ámbito de la telefonía móvil (donde Apple y Google destrozaron en dos años a los desprevenidos Nokia, Ericsson, Blackberry y unos cuantos más), pero con una gran velocidad cuando llegue el momento. Los grandes fabricantes no empujan el coche eléctrico, pero dan pasos para estar preparados entonces (entre 2020 y 2025).

Este tipo de acciones son importantes porque TESLA necesitará de todo el capital de marca posible para resistir el seguro impacto de esos temibles competidores.

Llegado ese día, la maquinaria de las empresas europeas, norteamericanas y asiáticas, hoy por hoy muchísimo más grandes que TESLA en todas las mediciones (industrial, de equipos de diseño y de canal de distribución) será capaz de inundar el mercado de vehículos 100% eléctricos, que, no lo olvidemos, tienen una tecnología básica más sencilla que la del motor de explosión.

Los conglomerados tecnológicos, como puede ser Bosch, que suministran a estos majors, pondrán los Mercedes y BMW a la misma altura que los TESLA en materia de conducción autónoma y conectividad. Por lo tanto, innovación de producto siempre a la par.

Así que volvemos al punto clave que ya conocéis los lectores de este medio: lo importante es el marketing.

Source: Puro Marketing